sábado, 30 de septiembre de 2006

Madrid I

Sepan vuestras mercedes que caminamos por las mismas calles donde otros hombres, de carne y sangre o quizá de leyenda, caminaron antes: Lope de Vega, Cervantes, Quevedo, Tirso de Molina, Murillo, Velázquez... Todos pisaron esta misma plaza.

Piénsenlo. Recuerden vuestras mercedes Madrid, suéñenlo, porque la memoria de los que les precedieron les demandará justicia.

4 comentarios:

Unknown dijo...

Hubo un tiempo en que Madrid me fascinó. Y ese tiempo se extendió a través de los años. Not anymore! No creo que ninguna ciudad pueda fascinarme como el Madrid y el Londres que un día conocí. De hecho no creo que nada pueda fascinarme como esas ciudades lo hicieron en otro tiempo.

UnaExcusa dijo...

Eso es porque aún no me conoces...

Unknown dijo...

Apenas puedo esperar a que llegue el momento!

UnaExcusa dijo...

:P